
Las garrapatas son unos ectoparásitos que pueden afectar tanto a perros, gatos como a humanos. Durante los meses de primavera y verano aumenta su incidencia y determinados hábitos de vida hacen más probable el poder contraerlas, como son por ejemplo las salidas frecuentes al campo.
Por ello, siempre debemos revisar a nuestro perro tras los paseos, sobre todo las zonas como orejas, inglés y entre las almohadillas, que es donde se suelen anclar. Si realizamos este ritual tras lo paseos podemos conseguir el retirarlas antes de que se anclen.
Si localizamos una o más garrapatas en nuestro animal, es importante que la retiremos lo antes posible. Lo haremos de la siguiente forma:
La zona de la picadura puede inflamarse, o incluso a veces llegar a formar abscesos (cápsulas llenas de pus), por ello debemos de vigilar la zona de inoculación y aplicar frío en caso de inflamación. Si esa zona se inflama de forma gradual y se forma una nodulación, debemos de acudir a nuestro centro veterinario.
La mejor prevención para evitar picaduras de garrapatas en nuestros animales son los antiparasitarios externos. Dentro del mercado actual, tenemos pipetas de distintas marcas, que debemos aplicar cada 2-3 semanas, dependiendo de la frecuencia con la que el animal acceda a zonas de campo o se bañe. Además, se venden antiparasitarios externos orales como el Bravecto ®, que también nos ayudan a combatir estos parásitos. Es importante tener en cuenta, que todos estos métodos, son barreras que nos ayudan a evitar el contacto, pero no son infalibles, sino técnicas complementarias para proteger a nuestro animal.
Además, hay que recordar que las garrapatas pueden infectar al ser humano y transmitirnos zoonosis (enfermedades transmisibles de animales a humanos).
Las garrapatas son ectoparásitos que fijan su aparato mandibular a la piel del animal y se alimentan de la sangre del huésped. A través de este medio, se transmiten enfermedades. Existen numerosas especies de garrapatas y en la Península Ibérica poseemos especies como Ixodes spp., Rhipicephalus ssp., Dermacentor spp.
Las principales enfermedades que pueden transmitir este tipo de parásitos son: Enfermedad de Lyme, Anaplasmosis, Erlichiosis, Babesia, Hepatozonoosis, etc. Muchas de ellas son transmisibles al ser humano.